Vivimos en una sociedad que da mucha importancia a estar en forma y tener una apariencia joven. Cada vez más, un rostro juvenil se correlaciona a la fortaleza y energía en todos los ámbitos de la vida de la persona. Un rostro juvenil debe tener armonía y adecuado volumen y correcta ubicación de los tejidos en sus tres tercios (superior, medio e inferior). La ritidectomía o lifting facial tiene por objeto retirar el exceso de piel y reposicionar la musculatura y tejidos grasos de los tercios medio e inferior de la cara recolocando estos tejidos en los lugares apropiados, fijándolos en planos profundos y que den adecuado soporte, modelando las estructuras anatómicas, devolviendo la firmeza, belleza y juventud al rostro.